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FUENTE: http://esmola.wordpress.com

SILVIO RODRÍGUEZ- POR QUIEN MERECE AMOR (CUBA,1985)

                                                                             

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FRIDA KAHLO

Hoy se cumplen 106 años del nacimiento de Frida Kahlo, pintora mexicana casada con el célebre muralista Diego Rivera.

Su vida estuvo marcada tanto por la poliomielitis que sufrió en su infancia como por un accidente de tráfico que la dejó postrada en cama durante largos períodos de su vida, siendo su propio sufrimiento un tema recurrente en su obra, estando además enormemente influida por el arte popular mexicano de raíces indígenas.

En su juventud, comenzó a frecuentar ambientes políticos e intelectuales, donde diversos contactos le llevaron a ingresar en el Partido Comunista Mexicano, en el que también militaba Diego Rivera, con quien se casó en 1929, siendo ésta una relación tormentosa, plagada de infidelidades por ambas partes, en cierto modo consentidas, lo que les llevó incluso a un divorcio en 1939, y a un segundo matrimonio un año después; Frida, debido a sus lesiones, nunca podría tener hijos.

Debido a las dificultades que los simpatizantes de izquierda tenían en su propio país, entre 1931 y 1934 se establecieron en Estados Unidos, regresando en 1935, cuando el romance de Diego con la hermana pequeña de Frida impulsó a ésta a intensificar a su vez sus escarceos amorosos, uno de los cuales tuvo lugar con León Trotsky.


                                                                         
                                                 


Tras ser su obra reconocida, siendo ésta una síntesis de elementos expresionistas y surrealistas, su salud se va deteriorando poco a poco, y en 1953 se organiza la única exposición individual en su país durante la vida de la artista, donde las críticas remarcaron que era imposible separar la vida y la obra de Frida, que sus cuadros eran su biografía.

Tras varios intentos de suicidio que perseguían aliviar el dolor y el sufrimiento de los últimos años, cuando se le llegó a amputar una pierna, murió en 1954, cubriéndose su féretro con la bandera del Partido Comunista Mexicano, hecho que irritó enormemente a los medios nacionales.

Las últimas palabras que aparecieron en su diario fueron: "espero alegre la salida y espero no volver jamás".